Las personas somos seres sociales y nuestro desarrollo personal, debe contemplar por tanto nuestra educación también en lo social. Al mismo tiempo, es importante que nuestros alumnos y alumnas se den cuenta que mediante su actitud y acciones, pueden mejorar la sociedad que les rodea.
En esta línea, son ¡más de 100! los alumnos y alumnas de bachillerato que realizan labores de voluntariado en Lauaxeta Ikastola y hemos querido estar con ellos para preguntarles de primera mano.
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¿Cuántos sois los alumnos y alumnas que realizáis labores de voluntariado?
Somos más de 100.
¿Más de 100? y ¿siendo voluntario? ¡Eso es una maravilla!
Sí, la verdad es que somos unos cuantos los implicados en esto.
¿Por qué comenzásteis en esto? ¿Qué os motivó?
Nos ofrecieron la posibilidad desde la ikastoa y dijimos que sí. Nos da la posibilidad de tomar parte en proyectos interesantes y de ver que más allá de nosotros, existe una gran implicación a nivel social; hay personas muy comprometidas.
¿Cúando desarroláis este tipo de actividades?
En algunos casos tienen lugar en la propia ikastola y en otros fuera de ella, ya sea entre semana o en fin de semana, en nuestro tiempo libre. En total dedicamos alrededor de 2 horas semanales.
¿Y qué tipo de actividades lleváis a cabo?
Son unas cuantas: acompañamiento a personas mayores, Ekoerropa, ayuda escolar a niños y niñas con problemáticas familiares, ayuda a alumnos y alumnas de la ikastola mediante juegos de mesa, informática o meditación, acciones de protección de animales, comercio justo, etc. Además, tomamos parte en campañas organizadas por la ikastola como la recogida solidaria de ropa, recogida solidaria de alimentos o la feria del libro de segunda mano.
¿Qué destacaríais de vuestra experiencia?
Sobre todo la ilusión con la que nos reciben. Los niños suelen estar esperando a que lleguemos para jugar con ellos al ajedrez, y los mayores agradecen nuestra compañía. Además, nos gusta escuchar anécdotas de primera mano de su juventud y darnos cuenta de hasta qué punto han cambiado las cosas.
Esta experiencia, nos ayuda también para conocernos más a nosotros mismos y darnos cuenta de que tenemos más paciencia y podemos aportar más valor del que creemos.
Y más allá de vuestro paso por la ikastola, una vez sigáis vuestro camino fuera de ella, ¿tenéis previsto seguir con este tipo de actividades?
Es posible, seguramente sí.